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miércoles, 3 de noviembre de 2010

INDEPENDENCIA DE CARTAGENA


La independencia de Cartagena se refiere a los sucesos ocurridos el 11 de noviembre de 1811, fecha en la cual Cartagena de Indias declaró su independencia absoluta de España, constituyéndose en el primer territorio de la actual República de Colombia en declararse como tal. La segunda ciudad de Suramérica (después de Caracas) en declararse independiente de España fue Cartagena de Indias, el 11 de noviembre de 1811, comenzando así una serie de sucesos de suma importancia y en los cuales pagaría cara la osadía de enfrentar al Imperio Español. Fueron diez años durante los cuales habría tanto victorias como derrotas. Fue una época de vital importancia en la que se forjaría el destino de libertad y emancipación de las provincias americanas.

Declaración de la independencia absoluta de España (1811)
Había en Cartagena de Indias a finales de la primera década del siglo XIX (19)una división entre sus gentes producida por la existencia de dos partidos: los toledistas y los piñeristas. Los toledistas eran comandados por
José María García de Toledo y los piñeristas los dirigían los hermanos Germán y Gabriel Gutiérrez de Piñeres.
Hubo una pugna por la Presidencia de la Junta Suprema de Gobierno, creada para dirigir los destinos de Cartagena de Indias mientras la situación en España se restablecía. Dicho cargo lo ganaría en elecciones García de Toledo. Los hermanos Piñeres, en su frustración, idearon una campaña encaminada a ganarse el apoyo del pueblo: la independencia absoluta de España. El orgullo partidista y patriótico de los Piñeres estaba en juego. Los hermanos decidieron reunir al pueblo estimulándolo a presionar para realizar la declaratoria de independencia absoluta. El
11 de noviembre de 1811 la Junta Suprema de Gobierno se reuniría en el Palacio de Gobierno para tratar ciertos temas, entre ellos el de la declaratoria de independencia absoluta, propuesto por Germán Gutiérrez de Piñeres, quien hacía parte de la Junta.
Los cartageneros convocados por los Piñeres que estaban reunidos en el
barrio de Getsemaní, esperaban con impaciencia el transcurso de la crucial reunión. Llegó entonces la noticia de que se aplazaría una vez más la susodicha declaratoria y la multitud enardecida y arengada por los piñeristas, entró en la Plaza de la Aduana de donde sacó de la Sala de Armas el aprovisionamiento suficiente para presionar por la fuerza, si era necesario, a la Junta de Gobierno. Entró la turba al propio Palacio de Gobierno, y en medio de recriminaciones a los aplazadores, lograron que los allí reunidos firmaran el Acta de Independencia Absoluta de España, toledistas, piñeristas (que regresaban al poder por la fuerza) y demás. Más tarde la Junta ordenó la lectura del "Bando" para hacer pública el Acta, jurando separarse definitivamente de la Corona Española.
Morillo sitía Cartagena (1815)
Véase también:
Reconquista (Colombia)
Fernando VII había vuelto a su trono luego de terminada la guerra contra Napoleón y no esperó más para enviar a América la poderosa
expedición militar comandada por Pablo Morillo, el Pacificador, quien tenía la difícil misión de reconquistar todas aquellas provincias americanas rebeldes a la Corona Española. Llegó tal expedición a costas de Venezuela, donde se preparó para partir hacia el Nuevo Reino de Granada, más específicamente a Cartagena de Indias que se había declarado en independencia absoluta de España.
El 20 de agosto de 1815 arribaron a costas cartageneras los primeros barcos de la flota de Morillo, que comenzaron con el bloqueo y sitio a la ciudad, no atreviéndose a tomarla a fuego y sangre por reconocer lo bien defendida que estaba tanto con hombres como con baluartes, murallas y fuertes. Los patriotas se atrincheraron y apertrecharon en su ciudad como pudieron, esperando y resistiendo la larga espera, pero el tiempo se encargaría de hacerlos padecer del hambre y las epidemias que se desataron con las muertes de los primeros. Pasados más de tres meses, el 4 de diciembre, la situación llegó al extremo con el fallecimiento de 300 personas ese día. Reunidos los desesperados patriotas, idearon soluciones o escapatorias. García de Toledo propuso radicalmente volar la ciudad estando Morillo y sus tropas dentro de ella y así morir todos, vencidos y vencedores. Pero acordaron más bien abandonar la plaza sin rendirse, escapar y buscar ayuda en el exterior para después volver y recuperar lo perdido. Así fue, y en todas las naves disponibles en el momento se organizó la multitudinaria salida, pero para caer más tarde en manos de los españoles, ser traicionados por los capitanes de barco y morir en tierras extrañas y unos pocos llegaron hasta Haití a reunirse con Bolívar para emprender la liberación de Venezuela. Esta dolorosa epopeya le valdría a Cartagena de Indias el honroso título de "Ciudad Heroica".
Bolívar sitia a Cartagena (1815)
Después de haberse tomado el Pacificador Pablo Morillo a Cartagena de Indias tras más de tres meses de atroz bloqueo, comenzó un régimen de terror. Muchos de los habitantes del pueblo de Bocachica fueron exterminados sin piedad ni juicio previo; hubo fusilamientos masivos en la Plaza de la Merced, encarcelamientos por el delito de deslealtad al Rey de España y otros abusos de autoridad. El objetivo de los españoles era dar un escarmiento ejemplar, y qué mejor manera de hacerlo que enjuiciando y ejecutando en plena plaza pública a los más reconocidos dirigentes de la ciudad. Nueve fueron los seleccionados para la pena capital, los cuales se juzgaron sumariamente y sin defensa legítima.
El 19 de febrero de 1816, el recién nombrado Consejo de Guerra dicta la sentencia: "Todo bien examinado, ..., el consejo ha condenado y condena a los referidos Manuel del Castillo y Rada, Martín Amador, Pantaleón Germán Ribón, Santiago Stuart, Antonio José de Ayos, José María García de Toledo y Miguel Díaz Granados, a la pena de ser ahorcados y confiscados sus bienes, por haber cometido el delito de alta traición. Y condena el Consejo a Don Manuel Anguiano a ser pasado por las armas, por la espalda, precediendo su degradación... y finalmente se condena a José María Portocarrero a la misma pena de ser ahorcado y confiscado sus bienes...". El 24 de febrero los mártires son llevados al sitio de ejecución, en las afueras del centro amurallado, cerca de la Ciénaga de la Matuna, y sus cadáveres fueron sepultados en una fosa común en el Cementerio de Manga. En el supuesto lugar donde fueron sacrificados hoy existe el Paseo o Camellón de los Mártires, construido en su honor.

Ejecución de los nueve mártires (1816)
A Bolívar le fue encomendada la misión de recuperar la ciudad de Santa Marta para la causa patriota. Debía entonces dirigirse primero a Cartagena de Indias para aprovisionarse de armas suficientes y luego encaminarse al objetivo principal, pero Cartagena de Indias estaba siendo dirigida por los "toledistas", con Juan de Dios Amador a la cabeza, quienes no prestarían tales armas a Bolívar puesto que este era amigo entonces de sus enemigos acérrimos, los hermanos Piñeres. Se aprestaron pues a atrincherarse en la ciudad para rechazar a Bolívar, próximo a llegar. A el Libertador no le quedó más remedio que presionar a la ciudad por la fuerza y montó el sitio a Cartagena de Indias desde el cercano Cerro de La Popa, el 26 de marzo de 1815. Simón Bolívar comenzó con una ofensiva diplomática, queriendo con esto evitar un inútil derramamiento de sangre entre patriotas. Envió mensajes conciliadores, serenos unos, desesperados otros, pero todos sin respuesta positiva por parte de los dirigentes toledistas, quienes temían les fuera arrebatado el poder por los piñeristas, si estos eran apoyados por Bolívar. Casi dos meses y medio duró el bloqueo impuesto por el Libertador, quien frustrado, sin armas para avanzar sobre Santa Marta (y conocedor de que el poderoso ejército del Pacificador Pablo Morillo ya venía de España en pos de la reconquista de las provincias americanas), dejó un mensaje para Cartagena de Indias antes de partir hacia Haití: "Esta consideración me estremece, y concibo que es más útil dejar de tomar a Santa Marta que forzar a Cartagena a auxiliar nuestra atención". Luego, ya embarcado enviaría este último recado: "el suceso que es el asunto de esta comunicación, no es un sacrificio, sino un triunfo para mi corazón. El que abandona a su país para ser útil, no pierde nada: gana cuanto le consagra...".
Cartagena es liberada (1821)
El 14 de julio de 1820 comenzaría el bloqueo más largo que padeciera Cartagena de Indias en toda su historia. En esos días los granadinos rechazaban al monarca español Fernando VII, quien había desdeñado la democrática Constitución de Cádiz restaurando la monarquía absoluta, y por esto mismo era repudiado en su propio país. Se encontraba entonces España en una situación delicada y con dificultades para controlar a sus colonias de ultramar que seguían dando lucha a las tropas de Morillo sin claudicar. La política española era la del diálogo con las fuerzas rebeldes en América. Cartagena de Indias era de los últimos rincones aún bajo el poder de los realistas, y estos viéndose cercados por tierra por el General venezolano Mariano Montilla decidieron parlamentar con él. El gobernador de Cartagena de Indias, Brigadier Torres y Velasco, quien era el comandante de la plaza también, no estaba dispuesto a entregar la ciudad sino a dialogar, y le mandó una nota a Montilla manifestándole tal deseo. Montilla respondió que no acordaría nada hasta que no se le entregara la ciudad. Bolívar también tuvo oportunidad de comunicarse con Torres pero no llegaron a ningún acuerdo definitivo para ambos.
En enero de 1821, el General José Prudencio Padilla obstruye la comunicación de los españoles con Bocachica, cerrando aún más el cerco alrededor de Cartagena de Indias y con esto la ayuda que recibían vía marítima. Pasaban los meses y la situación de los realistas se hacía más difícil. El 24 de junio de 1821, en la memorable Noche de San Juan, Padilla asalta a la flota realista guarecida en la Bahía de las Animas, cerca del actual Muelle de Los Pegasos. A la medianoche, en feroz combate cuerpo a cuerpo, las tropas realistas pierden muchos hombres y Padilla sale triunfador llevándose 11 barcos de guerra y armamento. Torres y Velasco, al verse perdido y abandonado a su suerte, se rinde entregando la ciudad días después. Es el 10 de octubre de 1821 y Cartagena de Indias es reconquistada por segunda vez, pero en esta ocasión para la causa patriota.

miércoles, 20 de octubre de 2010

miércoles, 6 de octubre de 2010

SEMANA CULTURAL EN CIUDAD BOLIVAR

Escenarios culturales
Casa de la Cultura Arborizadora bajaDirección: Carrera 38 No. 59B-43 Sur
Casa de la Cultura ArabiaDirección: Calle 82 Bis No. 18h-10 Teléfono: 7 923248.
Casa de la Cultura de San JoaquínDirección: Diagonal 81 a Bis Sur No. 17d-15 Barrio San Joaquín Teléfono: 7 925477.
Casa de la cultura de MéxicoDirección: Carrera 16C No. 65A-50 Sur

Festivales y eventos culturales
Festival de AntañoActividades artísticas de danza, canto, poesía, entre otros, realizada y dirigida a la población adulto mayor de la localidad.
Festival de DanzaDiferentes grupos locales realizan actividades artísticas en torno a la danza y a la música folclor y comparsas.
Festival de teatroDiferentes grupos de la localidad se encuentran para brindar al público una muestra de teatro en sus diferentes alternativas.
Festival de Hip-HopMuestra artística de música y baile de los diferentes grupos de la localidad del estilo del Hip-Hop.
Festival de Rock-Por los derechos humanosMuestra de los diferentes grupos del género rock.
Festival de San PachoDiferentes organizaciones artísticas del barrio San Francisco que realizan actividades artísticas en torno al teatro, la danza, la música y las comparsas. Así mismo de hace una exposición de artes y oficios referidos a tejidos.
Festival ComunalDiferentes Juntas de Acción Comunal realizan diversas actividades artísticas.
Festival de Vista HermosaDiferentes organizaciones artísticas del barrio Vista Hermosa que realizan actividades artísticas en torno al teatro, la danza, la música y las comparsas. Así mismo de hace una exposición de artes y oficios referidos a tejidos.
Festival por la VidaMuestra artística de música, teatro, danza.
Festival de CineMuestra de documentales, videos cortos realizados en la localidad, a la vez que se cuenta con una muestra internacional.
Festival Evaristo BernateMuestra artística y cultural.
Otros festivales y eventos
Semana Cultural y Carnaval Estudiantil de Ciudad Bolívar. Desfiles carnavalescos, deportes, intercambios culturales, danzas música y disfraces. Mes septiembre. Lugar: Parque Arborizadota Baja.
Carnaval de la memoria y tradiciones culturales en Ciudad Bolívar. Carnaval del Colegio Confraternidad de San Fernando. 7 de agosto.
Cumpleaños de la localidad: Actividades artísticas y culturales















miércoles, 8 de septiembre de 2010

los 60 años del colegio interamericano

El colegio interamericano celebra 60 años de historia en nuestra ciudad bogota.
Este colegio consta de aproximadamente 400 estudiantes que han sido historia. Antes el colegio interamericano era muy pequeño pero con el paso del tiempo se fue agrandando mas y mas hasta llegar a lo que es ahora por eso:
FELIZ CUMPLEAÑOS COLEGIO INTERAMERICANO Y GRACIAS POR DARNOS ESTO TAN HERMOSO

los 60 años del colegio interamericano

lunes, 30 de agosto de 2010

miércoles, 25 de agosto de 2010

miércoles, 11 de agosto de 2010

VIDA DE NUESTRO NUEVO PRESIDENTE















Esta fue, es y sera la vida de nuestro nuevo presidente Juan Manuel Santos Calderon:



Nació en Bogotá, el 10 de agosto de 1951. Fue cadete de la Escuela Naval en Cartagena, estudió Economía y Administración de Empresas y realizó cursos de posgrado en la Escuela de Economía de Londres, la Universidad de Harvard y la Escuela Fletcher de Leyes y Diplomacia.



Ejerció como Jefe de la Delegación de Colombia ante la Organización Internacional del Café (OIC), en Londres. Fue el último Designado a la Presidencia de la República y el primer Ministro de Comercio Exterior. También ha sido Ministro de Hacienda y Ministro de Defensa Nacional. En este último cargo le correspondió liderar la aplicación de la Política de Seguridad Democrática.



Creó la Fundación Buen Gobierno y fundó el Partido de la U en el año 2005, colectividad que es hoy la mayor fuerza política del país.



Ejerció el periodismo como Columnista y Subdirector del diario El Tiempo.


Recibió el Premio Rey de España y fue Presidente de la Comisión de Libertad de Expresión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). Ha publicado varios libros, entre los que se destacan La Tercera Vía, que escribió con el ex primer ministro británico Tony Blair, y Jaque al Terror, en el que describe los más duros golpes asestados al grupo terrorista de las Farc durante su periodo al frente del Ministerio de Defensa.



El 20 de junio de 2010 –después de haber obtenido el primer puesto en la primera vuelta de la elección presidencial, realizada el 30 de mayo del mismo año–, fue elegido en segunda vuelta Presidente de la República de Colombia por el periodo de cuatro años, comprendido entre el 7 de agosto de 2010 y el 7 de agosto de 2014. Obtuvo una votación superior a los 9 millones de votos, la más alta obtenida por candidato alguno en la historia de la democracia colombiana.



Desde su campaña ofreció liderar un Gobierno de Unidad Nacional que realice el tránsito de la Seguridad Democrática a la Prosperidad Democrática.



El Presidente Santos está casado con la señora María Clemencia Rodríguez, con quien tiene tres hijos: Martín (21), María Antonia (19) y Esteban (16).



Y el dice:



Gracias Colombia por elegirme como nuevo presidente de Colombia.


OTRA VEZ CON VENEZUELA

El conflicto que llevavan Uribe y Chavez ayer 10 de agosto de 2010 3 dias despues de la posesion presidencial de Santos se reestablecieron las relaciones con venezuela.

Relaciones exteriores de Colombia
Países con los cuales Colombia mantiene misiones diplomáticas.

Colombia Embajadas Consulados generales.
Las relaciones exteriores de Colombia son funciones del presidente de Colombia como jefe de estado, que son delegadas al
Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia o cancillería. La cancillería administra las misiones diplomáticas a otros países y representaciones ante organismos multilaterales.




miércoles, 4 de agosto de 2010





ASI SERA POSESION DE JUAN MANUEL SANTOS







La jornada de este sábado 7 de agosto empezará muy temprano, cuando el mandatario electo Juan Manuel Santos viaje a la Sierra Nevada de Santa Marta, donde hará un acto simbólico de posesión.


Desde el 20 de junio, cuando resultó elegido Juan Manuel Santos como el nuevo mandatario de los colombianos, su equipo empezó a planear cómo sería el 7 de agosto, el día de su posesión. Esa misma noche, la de su triunfo, quedó claro que en su campaña no había espacio para la improvisación. La ceremonia de victoria de Juan Manuel Santos, aquel 20 junio, estuvo marcada por un ambiente folclórico y patriótico. Un espectáculo de danzas, luces y música, en el Coliseo Cubierto de Bogotá, fue el marco en el que Santos habló por primera vez como presidente electo.
Y su posesión no será diferente. A pesar de lo solemne de la fecha, la música y los colores patrios marcarán el inicio de este nuevo gobierno. En la mañana del sábado, antes de empezar con los actos protocolarios, el presidente electo viajará en compañía de un par de personas de su equipo y de María Clemencia, su esposa, y María Antonia, Martín y Esteban, sus hijos, a la Sierra Nevada de Santa Marta, donde tendrá un encuentro con los indígenas momos, y donde hará un acto simbólico de posesión. Esta ceremonia será transmitida en diferido a las 2:30 de la tarde, minutos antes de que empiece el acto oficial a las 3:00 de la tarde. Sobre el mediodía, Santos estará en un almuerzo privado, antes de acudir a un oficio religioso que se realizará en la actual sede de la Cancillería, de donde saldrá acompañado por su familia en una caminata que irá hasta el Congreso. “En al camino habrá música, y estarán presentes niños y jóvenes con las banderas de los 32 departamentos de Colombia, vestidos con trajes típicos”, señaló Ricardo Galán, asesor de comunicaciones del presidente electo. “No habrá danza, pero sí sorprenderá la presencia de reconocidos artistas”, agregó Galán. La ceremonia durará cerca de tres horas, y será sobre una tarima ubicada en las escaleras del Capitolio Nacional, en la Plaza de Bolívar, donde Juan Manuel Santos asumirá como el nuevo Presidente de Colombia. Se espera que cerca de 5 mil invitados estén presentes en el acto. Como novedad, el presidente electo envió una invitación al presidente saliente, Álvaro Uribe Vélez, para que se haga presente, junto a su vicepresidente Francisco Santos, en la ceremonia en la Plaza de Bolívar. Lo protocolario es que el mandatario saliente espere al nuevo en el Palacio de Nariño, para luego de un saludo, éste entre al lugar donde vivirá los próximos cuatro años.


Sin embargo, parece que esta vez será diferente. En la tarima principal, además del Presidente electo y su familia, estará la mesa directiva del Congreso de la República y el Vicepresidente electo, Angelino Garzón, también con su familia. Frente a ellos serán ubicados, a un costado, los presidentes invitados, y al otro, los ex presidentes de Colombia, así como altas personalidades del país. En el centro estará el Congreso en pleno, ante quienes se juramentará Santos como el nuevo Presidente de Colombia. Los discursos que los colombianos escucharán durante la jornada serán, por lo que se sabe hasta ahora, dos. Uno estará a cargo del nuevo mandatario, durará 35 minutos y se destacará por el optimismo. En él, Santos también aprovechará para esbozar los lineamientos principales de su mandato. El otro, será el del presidente del Congreso, Armando Benedetti, que no superará los 15 minutos y que, según él, “está enfocado en cómo combatir las desigualdades sociales y la pobreza en el país”.


La banda presidencial que recibirá Santos cuando jure como nuevo Presidente ya está lista. Fue diseñada y bordada en Cali por el sastre Luis Abel Delgado, quien ha elaborado prendas para el Papa Benedicto XVI y varios presidentes en todo el mundo. Se espera que sobre las seis de la tarde el nuevo mandatario de los colombianos haga su arribo a la Casa de Nariño, donde ya investido recibirá el saludo de los invitados, en un acto denominado ‘besamanos’. Esta vez, a diferencia de años anteriores, por cuestiones de tiempo sólo se hará con algunos de los invitados, con los más especiales. Representantes del mundo, en Colombia Al acto de posesión de Juan Manuel Santos como nuevo presidente de Colombia, se ha confirmado la presencia de los siguientes presidentes: Cristina Fernández, de Argentina; Rafael Correa, de Ecuador; Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil; Leonel Fernández, de Republica Dominicana; Felipe Calderón, de México; Alán García, de Perú; Sebastián Piñera, de Chile; José Mujica, de Uruguay; Laura Chinchilla, de Costa Rica; Porfirio Lobo, de Honduras; Ricardo Martinelli, de Panamá; y Álvaro Colom, de Guatemala. El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, quien se creía que estaría, informó este martes que en representación de su país estará en Colombia el secretario de Estado francés para Asuntos Europeos, Pierre Lellouche. En la ceremonia de este sábado también estarán presentes el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón; el Premier de Aruba, Michael Godfried; Camille André Wipall, representante de Madagascar; y Mijeíl Saakashvili, de Georgia. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama no estará, pero en representación de este país hará presencia una delegación especial, donde estará el General James L. Jones, asesor presidencial de seguridad nacional.


Listas las medidas de seguridad La Policía Nacional dispondrá de un refuerzo de 4.000 hombres en Bogotá, para un total de 22.000, quienes están en aislamiento de primer grado, y harán parte del dispositivo de seguridad que se tiene programado para el próximo 7 de agosto. En todo el territorio nacional serán 160.000 los uniformados que intentarán garantizar una jornada pacífica. Así lo reveló el director de seguridad ciudadana de la institución, general Orlando Paéz Barón, quien además aseguró que con un globo aerostático, entre otros dispositivos de seguridad, se vigilará desde el aire la posesión presidencial.


A la Policía se sumarán 4.000 hombres del Ejército Nacional y 800 agentes del DAS. A partir del viernes a las 6 de la tarde y hasta el domingo estará prohibida la circulación de motos con parrilleros, así como la circulación de carros que transporten cilindros de gas, escombros o trasteos. Así mismo, el Ejército Nacional restringió el porte de armas de fuego en todo el departamento de Cundinamarca, desde las seis de la tarde del pasado lunes 2 de agosto hasta las seis de la tarde del miércoles 11 de agosto. La medida, adoptada por el Comando de la Decimotercera Brigada, suspende de manera general la vigencia de salvoconductos, licencias y permisos para el porte de armas de fuego, durante el periodo de tiempo antes mencionado.


Otras de las disposiciones tomadas para esta fecha es que no habrá ciclovía, a pesar de ser un día festivo. También se instalará un Puesto de Mando Unificado -PMU- en el Batallón Guardia Presidencial, desde el cual se monitoreará el desarrollo de la jornada.


Para contar con una mayor disponibilidad y estar atentos a cualquier situación que se presente, se declarará la alerta amarilla en el sistema de salud, entre el 5 y el 8 de agosto.


Para facilitar los actos protocolarios, propios de la posesión del nuevo Presidente, el sábado se suspenderán las obras de la Avenida 26, así como en la carrera 10 entre las calles 1 y 14, además habrá restricción vehicular en la carrera Séptima entre las calles 32 y la sexta.



miércoles, 28 de julio de 2010

EL 7 DE AGOSTO

La Batalla de Boyacá fue la batalla decisiva que garantizaría el éxito de la Campaña Libertadora de Nueva Granada y una de las batallas más importantes de la guerra de independencia de América del Sur. La batalla tuvo lugar el día 7 de agosto de 1819 en el cruce del rio Teatinos, en inmediaciones de la ciudad de Tunja. La batalla fue la culminación de 77 días de la campaña iniciada desde Venezuela por Simón Bolívar para liberar el Virreinato de Nueva Granada.

Preámbulo de la batalla
Tras el aplazamiento de la guerra en Venezuela por la época de lluvias Bolívar salió de Angostura, entonces capital de la República de Venezuela, hacia los llanos de Apure y después a los de Casanare sumando a sus dos divisiones la del general Santander y después invadió el territorio de la antigua provincia de Tunja. Barreiro tras ser vencido en Pantano de Vargas librada el 25 de julio de 1819, intentaba llegar a Bogotá y unir fuerzas con el virrey Juan de Sámano por la vía de Boyacá.
Luego del éxito obtenido en el pantano de Vargas, Bolivar reorganiza y da descanso al ejército hasta el 3 de agosto, cuando emprende la búsqueda del ejercito realista, que se ha retirado esperando refuerzos y una mejor oportunidad. El dia 4 de agosto via Toca toma el rumbo de Santafe de Bogotá, sin entrar a Tunja. Para no perder comunicación con la capital, Barreiro se ve obligado a movilizarse para intentar a cortarle el paso. El mismo dia a las 8:00 pm contramarcha a través de Paipa en forma sigilosa, entrando en Tunja el día 5 de julio a las 11 am, matando la guarnición y posteriormente dando alcance al gobernador de la provincia de Tunja, el teniente coronel Juan Loño, que había dejado la ciudad en la madrugada con 200 hombres y 3 piezas de artillería, atacando su retaguardia y dispersándolos. Con ese movimiento se apoderó de la ciudad, de 600 fusiles y pertrechos. Al descubrir el engaño, creyendo Barreiro que Bolivar en esos momentos se dirigía a Santafe, se dirige en su persecusión, pero al encontrarse con Loño, este le informa lo ocurrido en Tunja y decide que lo mejor es evitar el combate en la ciudad y dirigirse a la capital, para reunirse con Sámano y defenderla a toda costa; desvía la ruta por Motavita, a donde arriba a medio día del 6 de agosto, reanudando su marcha al día siguiente a las 3:00 de la madrugada buscando la vía mas rápida por el puente de Boyacá. Informado de la proximidad de los realistas en la madrugada de ese 7 de agosto, Bolívar observa desde el alto de San Lázaro a los españoles dirigirse hacia el puente, de inmediato ordena la puesta en marcha del ejército para interceptarlos.


Los ejércitos
Las tropas republicanas se conformaban del siguiente modo:
Número de combatientes: 2.850
Comandante en Jefe:General
Simón Bolivar.
División de Vanguardia:General
Francisco de Paula Santander.
División de Retaguardia: General
José Antonio Anzoátegui.
Jefe del Estado Mayor: General
Carlos Soublette.
Procedencias de los soldados: En su mayoría de
Venezuela y Colombia (granadinos). Notable presencia extranjera, como la legión británica.
Bajas: 13
Heridos: 53
Las tropas realistas se conformaban del siguiente modo:
Número de combatientes: 2.670 (Infantería 2.300; Caballería 350; Artillería 20).
Tercera División del Ejército Expedicionario de Costa Firme.
Jefe al mando: Brigadier
José María Barreiro.
Jefe del Estado Mayor: Sebastián Díaz.
Vanguardia al mando del coronel Francisco Jiménez.
Procedencias de los soldados: son tropas americanas en su totalidad, originarias de
Venezuela y Colombia (granadinos), excepto el estado mayor que es originario de España.
Bajas: aproximadamente 100 hombres.
Heridos: 150.
Prisioneros: 1.600.

Departamento de Boyacá, en donde se desarrolló la Batalla.
Desarrollo de la batalla
A las diez de la mañana del 7 de agosto de 1819 Bolívar dio la orden de impedir el paso de los realistas por el puente del río Teatinos, sitio de encuentro del camino de Samacá (utilizado por los realistas) y el camino real, movilizando su ejercito instalado en la ciudad de Tunja. El ejercito libertador estaba conformado por la vanguardia al mando de Francisco de Paula Santander con unos 800 hombres, el centro del ejército al mando de Jose Antonio Anzoátegui con 1320 hombres y la retaguardia conformada por 600 a 800 reclutas y milicianos del Socorro y Tunja. Las tropas de Bolivar debieron cubrir 16 km de distancia, marchando apresuradamente a partir de las 10:00 am, mientras que los españoles que tomaron la vía del páramo cubrieron 18 km partiendo desde la 3:00 am, para encontrarse ambos bandos a las 2:00 pm, cuando parte de la vanguardia patriota liderada por el capitán Diego Ibarra, desciende y sorprende a la vanguardia realista. En tanto el general Santander se enfrentaba con sus tropas a la retaguardia realista. Bien pronto se unió el grueso de las tropas realistas de Barreiro para enfrentarse a la retaguardia del general Anzoátegui. La vanguardia del ejercito independentista al mando de Santander consigue separar la vanguardia del ejército español del resto del ejército, ubicandose entre ambos, de hay en adelante los españoles se ven obligados a luchar separadamente.
Hacia las tres de la tarde los combates entre las dos fuerzas militares estaban en todo su apogeo; con los realistas en desventaja por estar divididos en dos frentes, son atacados por el batallón rifles haciendo retroceder dos cuerpos españoles, al mismo tiempo que los bravos de Paez y la
legión británica caen sobre la artillería y los flancos de los batallones de primera línea. En esa situación Barreiro trata de desplegar el batallón cazadores, pero Bolivar ordena a Anzoátegui que ataque el centro del dispositivo español, desorganizandolo, para entonces enviar al coronel Juan José Rondón en un fuerte contraataque con los lanceros llaneros que consiguió que los realistas retrocedieran en desorden. Mientras, la tropa del Casanare al mando de José María Ruiz pudo ubicarse a las espaldas de la vanguardia realista, el general Santander lanzó sobre el puente a los batallones cazadores y primeros de línea al mando de los coroneles Joaquín París Ricaurte y Antonio Obando. A estas alturas la batalla estaba completamente a favor de los independentistas y fue finalmente rodeado por el ejército libertador y obligados a rendirse a las 4:00 pm.
Al final de la jornada yacían en el campo de batalla 66 hombres entre muertos y heridos del ejército de Bolivar y unos 250 del ejercito español, siendo capturados aproximadamente 1600 hombres, pudiendo escapar solamente unos 800 soldados.
Posterior a esto, se firma un acta donde se declara la independencia absoluta de Colombia y se libera del yugo español. El virrey
Juan de Sámano fue informado en Bogotá por un mensajero secreto de la derrota realista y pudo escapar a tiempo. Finalmente Bolivar llego a Santafe de Bogotá donde entro sin resistencia el dia 10 de agosto de 1819 a la 5:00 pm.

Monumento a Simón Bolívar, Puente de Boyacá, Colombia
Orden de Boyacá
Bolívar creó la Orden de Boyacá en reconocimiento a todos los combatientes que participaron en dicho acontecimiento histórico. Actualmente el Estado
colombiano concede dicho reconocimiento a las personas nacionales o extranjeras que se destacan por su trabajo en bien de la patria.

Puente de Boyacá. Monumento y puente construido en el lugar de la batalla, reemplazando al puente original


Consecuencias históricas
La batalla de Boyacá fue un golpe decisivo para el poder español en la Nueva Granada. A pesar de que los realistas se harían fuertes en otras provincias del virreinato como Santa Marta y
Pasto, en donde resistirían varios años; la capital del virreinato cayó en manos de los patriotas neogranadinos y con ello se abrió el camino para la unión de la Nueva Granada con Venezuela en la República de Colombia.
Fiesta nacional

La Casa de Nariño en Bogotá, en donde se posesiona el nuevo presidente cada 4 años el día de la conmemoración de la Batalla de Boyacá.
En conmemoración, la
República de Colombia celebra el 7 de agosto como Fiesta Nacional y tiene lugar en la Casa de Nariño la posesión del presidente de la República cada 4 años.
Leyendas populares
La leyenda del niño soldado honrado
Véase también:
Uso militar de niños
Cuenta la leyenda que la mala suerte de Barreiro en tierras americanas quedó sellada esa misma noche de Boyacá cuando un muchacho de tan sólo 12 años, otros dicen 11 y otros 14, Pedro Pascasio Martínez, lo hizo prisionero, acompañado de un soldado llamado Negro José, después de negarse a ser sobornado por las monedas de oro de barreiro. El muchacho fue promovido por Simón Bolívar al cargo de teniente, otros dicen que a sargento.
Pedro Pascasio Martínez supuestamente fue un joven natural del pueblo de Belén Boyacá que precisamente se encargaba de cuidar los dos caballos del Libertador Bolívar. Por el heroico acto de atrapar al general Barreiro fue ascendido a sargento y se le prometieron 100 pesos que nunca fueron entregados. Junto con Negro José y muchos soldados más fueron dejados en el río Magdalena, antes de llegar a Santa Fe.
Fuera ya del mito, lo que se conoce con certeza es que el joven prisionero Barreiro, de 26 años de edad, fue fusilado por orden directa de Santander en otro episodio de la Guerra a Muerte. Otros 38 oficiales españoles rendidos en Boyacá corrieron la misma suerte de morir siendo también ejecutados. Por otro lado las ordenanzas militares de España prohíbian tajantemente el
uso militar de niños.




miércoles, 21 de julio de 2010

20 DE JULIO DE 2010 BICENTENARIO




La Historia de Colombia en el Bicentenario
24oct09Un proyecto oportuno
Los 200 años de la independencia de Colombia son una ocasión oportuna para que conozcamos nuestra historia. Desde los primeros pobladores hace miles de años, hasta la actualidad, en 13 documentales de una hora. La televisión es el medio masivo de nuestra época y no existe una historia de Colombia que aproveche bien sus recursos.
Una serie documental para nunca olvidar
Narraremos la dramática historia de Colombia, la contribución cultural de los indígenas, el cruce de indios, negros y blancos, las rebeliones de los comuneros, las luchas de Nariño, Bolívar y Santander para crear la República, los choques entre conservadores y liberales. El progreso económico, la ocupación del territorio, la evolución de la cultura, hasta los años recientes, a los esfuerzos por superar la violencia y el atraso. La serie será un retrato conmovedor e inolvidable de Colombia.
Una historia integral e imparcial
Esta historia no puede ser una narración aburrida de temas políticos y militares. Necesitamos entender cómo llegamos a ser lo que somos, cuál es el origen de nuestros problemas, riquezas y virtudes. La narración mostrará la vida cotidiana, las costumbres, diversiones y formas de alimentación, los procesos sociales y económicos, la agricultura, el comercio y la industria, el desarrollo de las comunicaciones, la formación de las ciudades, los conflictos políticos. Será una historia integral de Colombia.
Los 13 documentales
1. El territorio colombiano y sus primeros pobladores


2. Las sociedades indígenas


3. La conquista española


4. La Colonia


5. La Independencia


6. La organización del Estado


7. La ocupación del territorio


8. La economía y la entrada al comercio mundial


9. El siglo XX: violencia y paz


10. El texto, la imagen y el mundo de las comunicaciones


11. Las artes plásticas, la fotografía y el cine


12. La literatura, la música y la cultura popular


13. El siglo XXI
Una historia para todos
Una narración clara, atractiva y entretenida, logrará que esté al alcance de jóvenes estudiantes y de adultos y especialistas quienes podrán adquirirla y tenerla en todos los hogares colombianos, bibliotecas, colegios, consulados, embajadas o para que los visitantes la lleven en su equipaje. Además llegará mediante la Televisión a un amplio público.
Una investigación do y un material muy rico
Este proyecto exige una investigación exhaustiva. Bajo la dirección de un equipo de alto nivel, se apoyará en los principales historiadores del país y en las investigaciones más sólidas. Usará una rica iconografía: mapas históricos, dibujos y grabados, escenarios, construcciones y paisajes, imágenes fotográficas, el archivo cinematográfico y televisivo de los últimos 70 años. Entrevistas con historiadores y Productoras protagonistas complementarán el material histórico.

miércoles, 14 de julio de 2010

EL HIMNO NACIONAL


HIMNO NACIONAL DE LA REPUBLICA DE COLOMBIA
El himno nacional fue compuesto en 1887 con versos de Rafael Nuñez y música del compositor italiano, Oreste Sindici, para conmemorar el 11 de noviembre la Independencia de Cartagena. La Ley 33 del 28 de octubre de 1920, sancionada por el presidente Marco Fidel Suárez, le dio carácter oficial. Consta de coro y 11 estrofas:

Coro:
¡OH gloria inmarcesible!¡OH júbilo inmortal!en surcos de doloresel bien germina ya
ICeso la horrible noche!la libertad sublimederrama las aurorasde su invencible luz.La humanidad entera,que entre cadenas gime,comprende las palabrasdel que murió en la cruz.
IIIndependencia gritael mundo americano;se baña en sangre de héroesla tierra de Colón.Pero este gran principio:"el Rey no es soberano"resuena y los que sufrenbendicen su pasión.
IIIDel Orinoco el caucese colma de despojos;de sangre y llanto un ríose mira allí correr.En Bárbula no sabenlas almas ni los ojossi admiración o espantosentir o padecer.
IVA orillas del Caribehambriento un pueblo luchahorrores prefiriendoa pérfida salud.¡OH, sí! de Cartagenala abnegación es mucha,y escombros de la muertedesprecia su virtud.
VDe Boyacá en los camposel genio de la gloriacon cada espiga un héroeinvicto coronó.Soldados sin corazaganaron la victoria;su varonil alientode escudo les sirvió.

VIBolívar cruza el Andesque riegan dos océanos,espadas cual centellasfulguran en Junín.Centauros indomablesdescienden a los llanos,y empieza a presentirsede la epopeya el fin.
VIILa trompa victoriosaen Ayacucho truena,que en cada triunfo crecesu formidable son.En su expansivo empujela libertad se estrena,del cielo americanoformando un pabellón.

VIIILa virgen sus cabellosarranca en agoníay de su amor viudalos cuelga del ciprés.Lamenta su esperanzaque cubre loza fría,pero glorioso orgullocircunda su alba tez.
IXLa patria así se formatermópilas brotando;constelación de cíclopessu noche iluminó.La flor estremecidamortal el viento hallando,debajo los laurelesseguridad buscó.
XMas no es completa gloriavencer en la batalla,que el brazo que combatelo anima la verdad.La independencia solael gran clamor no acalla;si el sol alumbra a todos,justicia es libertad.
XIDel hombre los derechosNariño predicando,el alma de la luchaprofético enseñó.Ricaurte en San Mateoen átomos volando,"deber antes que vida"con llamas escribió.

LA BATALLA DE BOYACA





La Batalla de Boyacá fue la batalla decisiva que garantizaría el éxito de la Campaña Libertadora de Nueva Granada y una de las batallas más importantes de la guerra de independencia de América del Sur.
La "Batalla de Boyacá" fue la culminación de 77 días de la campaña iniciada por
Simón Bolívar para liberar el Virreinato de Nueva Granada. Tras el aplazamiento de la guerra en Venezuela por la época de lluvias Bolívar salió de Angostura, entonces capital de la República de Venezuela, hacia los llanos de Apure y después a los de Casanare sumando a sus dos divisiones la del general Santander y después invadió el territorio de la antigua provincia de Tunja. Barreiro tras ser vencido en Pantano de Vargas intentaba llegar a Bogotá y unir fuerzas con el virrey Juan de Sámano por la vía de Boyacá.
La Batalla tuvo lugar el sábado
7 de agosto de 1819. A las diez de la mañana Bolívar dio la orden de impedir el paso de los realistas por el puente del río Teatinos, sitio de encuentro del camino de Samacá (utilizado por los realistas) y el camino real. A las dos de la tarde los republicanos, liderados por el capitán Diego Ibarra, descienden y sorprenden a la vanguardia realista. En tanto el general Santander se enfrentaba con sus tropas a la retaguardia realista. Bien pronto se unió el grueso de las tropas realistas de Barreiro para enfrentarse a la retaguardia del general José Antonio Anzoátegui.
Hacia las tres de la tarde los combates entre las dos fuerzas militares estaban en todo su apogeo, pero los realistas tenían la desventaja de estar divididos en dos frentes. El coronel
Juan José Rondón hizo un fuerte contraataque con los lanceros llaneros y consiguió que los realistas retrocedieran en desorden. Mientras, la tropa del Casanare al mando de José María Ruiz pudo ubicarse a las espaldas de la vanguardia realista, el general Santander lanzó sobre el puente a los batallones Cazadores y Primeros de Línea al mando de los coroneles Joaquín París Ricaurte y Antonio Obando. A estas alturas la batalla estaba completamente a favor de los independentistas y, aunque Barreiro trató de recuperarse, no le quedó otro camino que rendirse, dando por terminado el histórico momento a las 4 de la tarde.
Posterior a esto, se firma un acta donde se declara la independencia absoluta de Colombia y se libera del yugo español
El virrey
Juan de Sámano fue informado en Bogotá por un mensajero secreto de la derrota realista y pudo escapar a tiempo.

LA SITUACION ECONOMICA



se expone en los capítulos históricos de este libro, las colonias de Suramérica no tuvieron bajo la dominación española libertad política ni económica. Y después de alcanzada la independencia, todas las fuerzas se concentraron durante decenios, también en Colombia en la forma y perfeccionamiento del poder público, en tanto que los problemas económicos quedaron las más de las veces a merced del azar o de la eficacia de empresas extranjeras. La falta de compresión existente en Colombia para las tareas yfines económicos del país se hizo manifiesta no en ehúltimo término en cuanto a su posición frente al exterior. Puede muy bien afirmarse que hasta principios de nuestro siglo, e incluso hasta la guerra mundial; Colombia vivió encerrada en sí misma —en medida más o menos notoria- y no fue afectada por los acaecimientos internacionales. De hecho, ninguno de los productos de este país era tan imprescindible que el mundo necesitaraproveerse de ellos a toda costa. Las altas finanzas, por su parte, tuvieron suficientes zonas donde invertir su dinero, y ello con riesgos probablemente menores y con las mismas perspectivas de beneficio. Todo esto, favorecido ahora por diversas circunstancias, se ha cambiado enormemente en los últimos años. De un lado, no dejó de producir impresión el hecho de que Colombia no hubiera sufrido revolución alguna desde 1903 y que desde esa fecha se hubiera ido amortizando con la más pulcra exactitud la deuda pública. La general convicción de la necesidad de la paz para alcanzar el bienestar propio, creó en el país mismo la mejor base para elflorecimiento económico. Más tarde, además, el afán de los Estados Unidos de desplegar una actividad capitalista en Suramérica coincidió con la necesidad colombiana de ampliar sus carreteras yferrocamies, y con el descubrimiento de su riqueza petrolífera. Colombia, que además supo conservar las antiguas relaciones con Europa, se destacó súbitamente y de modo notable con los esfuerzos de las grandes potencias dirigidos a Suramérica.
La siguiente ojeada a las cuestiones económicas de índole interior y exterior que han de ser afrontadas por Colombia pretende, no en último lugar, llevar a la convicción de la persona que se halla al margen de estos problemas lo d!fícil que para un país, valga la expresión, soiprendidoporeldesarrollo económico, resulta dirigir debidamente la explotación de los tesoros de su suelo y no ser víctima de la propia riqueza.
La exposición de la enmarañada historia económica de Colombia entre los años 1884 y 1903 puede ser dejada aquí de lado, sin mayor perjuicio, pues las incesantes luchas políticas paraliza ron toda especie deprogresoy obstaculizaron en particular, la conversión en suelo cultivable de grandes extensiones de terreno adecuadas para la colonización. El acontecimiento de máxima importancia económica sobreviene el año 1903, en que el general Reyes, terminada la última revolución, puso fin a la economía del papel moneda introducida como consecuencia de todo aquel desorden. Por cada 100 millones de pesos papel que se retiraron de la circulación, invirtió Reyes tan sólo un millón de pesos oro. Esta medida era de una dureza inexorable; hoy día no nos pareceya cosa fuera de lo común, porque el apoyo a los valores monetarios en Europa después de la guerra de 1914 a 1918 reclamó sacrificios de muy superior cuantía. Pero entonces se tenía la impresión de que Colombia, enteramente empobrecida y casi sin rentas públicas, no podría restablecerse tan pronto de aquella forzada reforma monetaria. En realidad, casi ningún estado comercial de Europa tomaba entonces en serio la exportación a país tan poco conocido, cuya escasa capacidad adquisitiva apenas permitía hacer compras y que sólo lentamente se iba reponiendo de las heridas de las interminables guerras civiles. Pero dentro de la misma Colombia se estaba gestando entretanto una profunda transformación cuya importancia y consecuencias económicas, al principio, no eran ni siquiera calculables. Listos y emprendedores propietarios habían hecho intentos de plantar café en los repliegues de la cordillera, alcanzando en aquella tierra virgen rotundos éxitos. Colombia empezó entonces con el cultivo de café en gran escala y puso así las bases para un definitivo crecimiento económico. ¿Quién hubiera sospechado entonces que Colombia iba a ocupar hoy después del Brasil el primer puesto en la exportación cafetera y que llegaría a ser el mayor productor del llamado café suave? El espléndido clima propio de las faldas de las cordilleras, entre los 1.000 y 1.800 metros de altitud y con la rotación de las dos estaciones lluviosa y seca, permite la ob­tención de dos cosechas al año. Bajo los frondosos árboles que no pierden su follaje jamás, madura lentamente un fruto de máxima finura, pues no tiene la aspereza del café brasileño, que se cría en inmensos campos de superficie ligeramente ondulada y sin arbolado ninguno. Por último la baratura de la mano de obra permite aplicar al fruto, también durante la cosecha un cuidadoso tratamiento. De este modo el café colombiano ha logrado un buen nombre en el mercado mundial y está justamente reconocido como uno de los mejores productos de este ubérrimo país. Más dedos millones y medio de sacos, de 62 kilogramos y medio,fueron exportados por Colombia el año 1928, y como las plantas ya viejas no disminuyen en su rendimiento al tiempo que surgen de continuo nuevas plantaciones, apenas es controlable toda esta riqueza. Si el café puede mantener sus precios como en los últimos años, las perspectivas siguen siendofavora bies. Pero si, de modo seme­jante a lo acontecido con el azúcar empezara súbitamente a perder valor, ello acarrearía mucha miseria a Colombia. Por ello la preferencia de un producto de exportación constituye siempre gran peligro para el desarrollo de todo un país.
La situación económica de Colombia se había ido mejorando paulatinamente en el curso de los años, pero al estallar la guerra mundial, este país quedó también, de un golpe, aislado de toda comunicación con las naciones de allende los mares. Las potencias beligerantes necesitaban todos los buques disponibles para las travesías de mayor importancia, de manera que Colombia, que no tiene flota mercante propia, apenas recibía del exterior las mercancías más imprescindibles, yya no podía exportar su café. Las cosechas fueron almacenándose en el país, hasta que este riesgo fue a convertirsefinalmente en una ventaja, pues, acabada la guerra, todo el café alcanzó una demanda vertiginosa; el año 1919 señaló ventas gigantescas a precios nunca vistos. La libre exportación dio por resultado una balanza de pagos extraordinariamentefavorable, y el dólar US.A., cuya cotización era de 1023/4 por ciento en relación con el peso oro, descendió en enero de 1919 hasta e184. Pero pronto habría de cambiarla situación. Los viajantes de comercio llegados por entonces del exterior encontraron el pa ís desprovisto de toda clase de mercancías, y, a pesar de los elevados precios de la posguerra, no daban abasto con los pedidos. Se evidenció que la industria colombiana se hallaba todavía en sus comienzos, faltando allí las bases que permitieron a Argentina, Brasily Chile lograr su independencia económica durante una guerra que para Europa resultaba suicida. Los artículos comprados por Colombia con afán verdaderamente insaciable, empezaron a afluir al país y a ser rápidamente distribuidos por los diversos mercados, donde se vendían con altos beneficios. Pero aquella enorme abundancia de mercancías encontró tan desprevenidas a las comunicaciones, que la época de sequía de principios del año 1920 y el consecuente descenso de nivel en el Magdalena produjeron en los puertos del litoral congestiones de tráfico imposibles de imaginar por un comerciante europeo. Atestados muy pronto todos los almacenes y depósitos, hasta las más valiosas mercancías hubieron de quedar a la intemperie sin protección alguna, perdiéndose sumas de millones. Al no recibir sus pedidos los respectivos compradores, empezaron a incumplirse los pagos. Las cotizaciones de cambio ascendían sin cesar y el dólar llegó a estar a 127 en octubre de 1920; había subido, pues, cuarenta y tres puntos en dieciocho meses. En esos momentos estalló la crisis económica en todo el mundo, arrastrando también a Colombia. Los precios del café bajaban de forma continua. El comercio y el tráfico se hallaban enteramente paralizadós y cundía por todas partes profunda desesperación. Mas el comercio colombiano supo mantener en alto su honor y, en medio de los mayores sacrificios, saldó los com­promisos con el extranjero. En aquellos años difíciles, las naciones exportadoras de Europa tuvieron, de cierto, con Colombia pérdidas relativamente muy escasas. Esa noble actitud dio, de otro lado, sus frutos, sirviendo de base al actual crédito del país.
Cuando enjulio de 1923 hubo de suspender pagos uno de los bancos más conocidos de Bogotá, el enérgico presidente Ospina dispuso una moratoria general de cuatro días, con lo que ganó el tiempo necesario para que la comisión de expertos norteamericanos en finanzas, poco antes llamada por él, pudiera fundar el banco nacional colombiano, Banco de la República. Esta nueva institución, a la que se otorgó el derecho exclusivo a la emisión de billetes y cuya primera reserva de oro fue traída en avión a Bogotá, intervino sin demora en la situación. Ya a los seis meses el peso se hallaba nuevamente a la par con el dólar; el país estaba salvado.
Al propio tiempo comenzaron a subir en el mercado mundial los precios de los productos del suelo, y a la cabeza de todos ellos el café. Esta posición de preferencia se explica principalmenteporel hecho de que los Estados Unidos, a causa de la ‘prohibición”, pedían mucho más café que antes. Por ello Colombia se rehizo con rapidez sotprendente de su conmoción económica. La trascendente y grave consecuencia de ello fue, sin embargo, que la suerte del país esté hoy indisolublemente ligada a los precios del mercado mundial y que ya no sea posible a Colombia dirigirporseparado su vida económica. Esta cuestión debería ser mejor considerada por los políticos y economistas colombianos. Pero, hasta ahora, los círculos influyentes de Colombia prestaron su atención sobre todo a los aspectos gratos de estas relaciones internacionales y trataron de obtenerde ello la posible utilidad. En este sentido, y después de haber disminuido considerablemente las antiguas deudas anteriores a la guerra, el Estado ha comparecido recientemente como prestatario en el mercado de dinero y—en el fondo, con íntima sorpresa de su parte- ha recibido, solícitamente y no muy caros préstamos de Nueva York. En los últimos tiempos se acudió de continuo a este sencillo medio de los empréstitos del exterior al objeto de encarrilar debidamente un desarrollo económico que, tomando al país con desenfrenado brío, sacudía de su largo sueño a todas las fuerzas inactivas y exigía abundantes cantidades de dinero. Si esta transfusión de sangre efectuada desde el exterior servirá para robustecer suficientemente a la economía de Colombia dándole fuerza para vivirporsí misma, es cosa que se verá en años venideros. Démonos hoy por conformes con describir este súbito proceso, al tiempo que indicamos sus consecuencias.
Hace unos cinco años sonó en Colombia esta consigna. “Cread para el país medios de comunicación y se abrirán posibilidades ilimitadas”. Esta llamada sacó de su letargo a las fuerzas latentes, pues hasta el indio analfabeto podía entender la trascendencia del propósito. Lo que para un país como Colombia había de significar semejante convicción, cuyo entusiasmo llegó al pueblo todo, sólo pueden juzgarlo exactamente los que han conocido la situación en los años de la anteguerra. Todavía en 1920 las cosas se encontraban en condiciones bastante parecidas a las descritas por el autor de El Dorado. En cuanto a vías férreas, sólo se habían construido unos 700 kilómetros, repartidos en distintos trechos no relacionados entre sí, y esto en un país treinta veces mayor que Suiza. Un tercio de estas vías se hallaban en manos inglesas, y sus ganancias limpias no constituían otra cosa que una contribución pagada al extranjero. No había, por así decirlo, ninguna ca rretera practicable para autos o camiones. De las ciudades arrancaban en d(ferentes direcciones no más que principios de caminos de, acaso, 5010 kilómetros de longitud; eso era todo. La única excepción era la carretera del Norte, construida por el eficaz y previsor general Reyes; esta vía arrancaba de Bogotá en dirección norte y llevaba a Belén de Cerinza, pasando por Tunja; su recorrido comprendía unos 250 kilómetros. La navegación por el Magdalena constituía la única arteria de comunicación relativamente organizada. Con un buen vapor y siendo alto el nivel del río, era posible llegar en diez días desde la costa Atlántica hasta Girardot.
Pero también ocurría a veces que, siendo malas las circunstancias, durase el viaje treinta y aún más días. Acerca del actual estado de la navegación fluvial proporciona más referencias el capítulo “Por el Magdalena “.
Hasta hace diez años, el viajar era, pues, en Colombia, cosa extremadamente molesta y pesada. Sendero y mula lo eran todo en la mayor parte de los itinerarios. En tal situación vino a ocupar el sillón presidencial, el 7 de agosto de 1922, Pedro Nel Ospina, hombre que dedicaría toda su capacidad de trabajo al progreso económico del país y a la ampliación de las comunicaciones. Había conocido los Estados Unidos en calidad de joven ingeniero, y era el primer Presidente de Colombia que después de la separación de Panamá experimentaba una cierta simpatía hacia aquella nación. Hg/o del presidente anterior Mariano Ospina, siguió siendo un fiel secuaz del partido conservador, pero su ideas eran menos rígidas que las defendidas por su padre. En breve tiempo se ganó Pedro Nel la confianza del pa ís y la oposición liberal le dejó actuar sin ofrecerle especial resistencia. Los cuatro años de su presidencia pueden ya calificarse como los más afortunados que ha vivido Colombia desde fines del pasado siglo. Con razón, Ospina quiso en primer lugar poner orden en el presupuesto del Estado antes de entrar a resolver los problemas de las comunicaciones. Y así hizo venir a Colombia una comisión financiera norteamericana bajo la dirección del profesor Kemmerer. Estos técnicos pudieron trabajar, de un lado, sobre la firme base de los 25 millones de dólares que a la sazón hacían efectivos los Estados Unidos en concepto de indemnización por la anterior ocupación de la zona del Canal de Panamá. De otro lado, las cámaras, bajo la impresión de haberse superado la crisis, se inclinaron a aprobar las innovacionesproyectadaspor la citada comisión ypor Ospina. Se contaba, pues, con las condiciones previas para realizar un trabajo provechoso, y la comisión se anotó un gran éxito. Otras varias comisiones extranjeras llamadas más tarde por Ospina en relación con asuntos de instrucción, aduanas, ejército, teléfonos, policía y régimen penitenciario fueron, desgraciadamente, menos afortunadas en su cometido, pues los proyectos aportados no eran de la misma urgencia. Las más trascendentes reformas de la Misión Kemmerer consisten, aparte de otros proyectos, en la fundación del banco nacional emisor (Banco de la República) y en la creación de un centro del tesoro con carácter independiente (Controlaría de la Nación). A estas dos instituciones hay que agradecer en gran parte el ingente desarrollo de los últimos años.
Sería prolijo detallar aquí la ley sobre creación y fines del banco nacional. Citemos únicamente que el banco se halla organizado como sociedad privada y que sus acciones son de tres clases. A). Acciones del Estado; B). Acciones suscritas por otros bancos, a causa de lo cual hubieron de participar también las sucursales de bancos extranjeros en Colombia, pues de lo contrario su esfera de negocios habría resultado legalmente reducida; C). Acciones adquiridas porpersonas privadas. De este modo se creó una gran reserva de oro, garantizándose en forma legal el cobro de los billetes de banco. La estabilidad de la moneda colombiana, estabilidad conseguida por ese medio, manifiestó en plazo brevísimo sus benéficos resultados, según indicamos anteriormente. Además la Dirección del Banco de la República ha realizado desde entonces en forma tan feliz el control del cambio extranjero, que en los últimos años el peso oro se ha mantenido a la par con el dólar, salvo insignificantes oscilaciones.
En estrecho contacto con el Banco de la República trabaja la Contraloría, por cuando ésta se ocupa de conservar el equilibrio entre los ingresos y los gastos. Sobre la base de los anteriores estados de cuentas, se formula en cada caso el presupuesto, contándose a lo sumo con el 10 por ciento de ingresos suplementarios y no pudiendo superar el total de los gastos al de los ingresos. Cuando e/presupuesto es aprobado por las cámaras, la Controlaría tiene el deber de vigilar el cumplimiento y, en especial, denegar todos los gastos que pasen de las sumas previstas. En los últimos cinco años, gracias al favorable desarrollo ecoflómico, los ingresos fueron regularmente mayores de lo presupuestado, de manera que las cuentas públicas cerraron siempre con superávit. Las provechosas consecuencias de estas reformas son, sin duda, claras para quien conoce las peculiares circunstancias de Suramérica. Los d!ferentes ministerios y otros organismos oficiales son objeto de limitación en su libre disponibilidad, con lo que el ciudadano contribuyente puede otorgarsu confianza a la administración pública.
Junto a estas medidas para el saneamiento del presupuesto nacional, se intervino también en la economía privada mediante la promulgación de una ley bancaria extremamente severa, que podría servir de ejemplo a algunos estados de Europa. La propia Controlaría está facultada y obligada a efectuar regularmente un control de la gestión de todos los bancos establecidos en el país. Los bancos, porsu parte, deben presentar semestralmente para su examen los correspondientes balances de negocios y publicarlos seguidamente en los diarios. Asi la parte inculta de la población comienza lentamente a tener confianza en los bancos y, porfin, usar de la posibilidad que se le ofrece de hacer imposiciones de ahorro con los correspondientes intereses a su favor. Hoy día la estructura económica del país es ya sana, y ello se debe no en último término a los proyectos de Kemmerer, cuyas reformas, después de algunas mínimas mod!ficaciones, han dado espléndidos resultados.
De los 25 millones de dólares que recibió Colombia de los Estados Unidos como reparación por la pérdida de Panamá, el Gobierno ingresó 5 millones en el Banco de la República, obteniendo, como indicamos antes, un gran resultado. La mayor parte de la indemnización, de acuerdo con las directivas del Presidente, fue adjudicada al Ministerio de Obras Públicas. Pero, según criterio general, los órganos legislativos cometieron en este punto un lamentable error, pues en el ministerio tan generosamentefavorecido faltaba un plan de envergadura para la debida inversión de los fondos. En vez de aplicar sistemáticamente aquellos millones en obras de pública utilidad, sin tener en cuenta intereses personales o de partido ni tampoco aspiraciones demasiado locales, se desparramó toda la riqueza; en vez de emprender uno tras otro los diversos proyectos, se empezó a trabajar simultáneamente en los lugares más distintos. Con casi pueril impaciencia, cada departamento se apresuraba a reclamar su propio ferrocarril, hasta que las autoridades, mareadasporta ntas peticiones, terminaban por decir que sí a todos. Así se dilapidaron dineros y energías, y al cabo de algunos años de enormes dispendios, los resultados positivos son más bien escasos. Además, eso poco que se hizo sirve por hoy tan sólo a necesidades localmente limitadasi, y las diferentes partes del país se ven, como antes, abandonadas a sus propios medios. Bogotá sigue sin poder prolongar su ramal férreo hasta el caudaloso tramo inferior del Magdalena. Cartagena está construyendo el Ferrocarril Central a través de las fértiles llanuras del departamento de Bolívar, pero todavía no ha podido establecer el enlace con el departamento de Antioquia. Medellín quería extender su vía férrea en dirección Oeste hasta el río Cauca, empalmar allí con el ferrocarril del Pacifico; mas para eso habrán de transcurrir aún muchos años de esforzados trabajos. Sólo Manizales concluyó tenazmente su vía férrea, y en Cartago estableció el enlace con el citado Ferrocarril del Pacífico, de modo que en determinados días puede viajarse desde Manizales hasta Buenaventura, o sea hasta el mar.
Las dificultades que se oponen en Colombia a la realización de los proyectos de vías de comunicación, son de magnitud extraordinaria. Contribuye a esto que el arrollador progreso experimentado por el tráfico moderno en todo el mundo, ha encontrado a Colombia en un estado que corresponde al Europa a mediados del siglo XIX. El observador imparcial reconoce que el clima y las condiciones del suelo dificultan, sin duda, en Colombia al desarrollo del tráfico, pero que no por eso constituyen obstáculos insuperables. Al colombiano, en cambio, le cuesta liberarse de las realidades actuales, aunque también élse halla convencido de la formidable capacidad de desarrollo y del gran futuro de su país. Así ocurre, desgraciadamente, que los ingenieros, al establecer el trazado de una línea férrea, no siempre escojan el recorrido que técnica y económicamente sea el mejor, debiendo atenerse a toda clase de circunstancias políticas y llevar la vía de población en población, cosa que a menudo resulta suma»wnte inadecuada. Muchas ciudades pequeñas y pueblos situados en el campo podrían muy bien progresary crecersin necesidad de hallarse precisamente enlazados a las principales vías de comunicación. En cambio, una vía de recorrido más correcto podría hacer accesibles en poco tiempo regiones favorablemente situadas aunque todavía poco pobladas. Y entonces sería posible ofrecer buenas tierras a la tan deseada inmigración de granjeros y colonos de sanas características. Sin cuidarse de ello, los colombianos siguen construyendo preferentemente hoy día pequeñas vías de acceso que irradian en forma oblicua desde el Magdalena a las ciudades; al hacerlo no piensan que los españoles, en su tiempo, establecieron los poblados con puntos de vista de muy distinta índole.
Necesaria es, ante todo, una “línea del Norte” en la Cordillera Oriental, que enlace la Sabana de Bogotá con las fértiles altiplanicies de Boyacá y baje luego a las ricas depresiones de los departamentos de Santander del Sury del Norte, para alcanzar el Océano Atlántico en un buen puerto, como Santa Marta o más al Este. No se sabe todavía si este deseo de un enlace directo de Bogotá con el mar lo realizará la “Línea del Nordeste’ empresa acometida actualmente por Bélgica con admirable eficacia y empuje. Bogotá tiene que comunicar también lo más rápidamente posible, con el Océano Pacffico, máximo por cuanto ese enlace transversal debe superar la Cordillera Central entre Ibagué y Armenia. No existe la menor duda de que esas dos líneas principales se podrían sostener por sí mismas o, al menos, pagar los intereses del capital invertido.
En lugar de relegar a segundo término ante estas imprescindibles vías de comunicación las demás exigencias deferrocariles, por todas partes se empezaron obras de semejante género. El dinero recibido del exterior en forma de empréstitos se ha gastado ya, sin que las mínimas obras realizadas den para abonar los réditos correspondientes. A esto se suma que todas las líneas hasta ahora construidas son de vía estrecha y que ni en las curvas y subidas, como tampoco en los puentes y túneles, se ha pensado en una ulterior transición a la vía ancha (o normal). Si este cambio se hace necesario un día, los actuales trazados tendrían que ser modificados en su ma­yor parte. Ello tiene también capital importancia en cuanto a los muy deficientes accesos a las ciudades.
En Europa, la misma vía de ancho normal —la de mayor rendimiento— apenas está en situación de competir con el transporte por medio de camiones. ¿Cómo podrá lograrlo más tarde en Colombia la simple vía estrecha, cuyos costos de construcción, porotra parte, son allí incomparablemente más elevados a los de la vía ancha en los países europeos? Pa rece, por desgracia, una exageración, pero noporello es menos cierto, que en Colombia existen líneas férreas en las que el kilómetro de vía estrecha ha valido bastante más de un millón de francos suizos y que los gastos del trazado y tendido han representado medio millón aproximadamente. No obstante, los gastos de explotación de estas líneas quedan pronto cubiertos, y ello apesarde que las ta rifas para viajeros y mercancías no son especialmente altas en comparación con lo usual en Europa. Pero en cuanto a rapidez y comodidad, los trenes de allí son todavía bastante inferiores a los nuestros. En muchos recorridos funcionan diariamente solo uno o dos trenes de viajeros en cada dirección; tampoco el tráfico de mercancías es muy grande. Las empresasferroviarias, portal motivo, pueden mantener en límites reducidos sus gastos de personal y para material rodante; mas, por otro lado, deberían dedicar mayor atención a la amortización de las instalaciones. Existe además una ley según la cual los departamentos y las sociedades privadas reciben del Gobierno Nacional una aportación de 20.000 pesos (100.000 francos suizos) por cada kilómetro de vía que se entrega listo para el tráfico. Esta ley, realmente, ha fomentado mucho la construcción de vías férreas y ha permitido también a los departamentos pobres llevar a cabo grandes planes de tráfico de su propio interés